MANUEL BELGRANO vs. ERNESTO LACLAU

AM | @agumack

Causó cierta sensación la entrevista de Hugo Alconada Mon a Ernesto Laclau en La Nación [ver]. "¿Por qué tiene que haber un límite [a la reelección]?", se pregunta el politólogo. La entrevista ocurre un año antes del bicentenario de un texto notable, pero completamente olvidado por la inteligentzia argentina: la traducción, por Manuel Belgrano, de la Despedida de Washington al pueblo de los Estados Unidos [ver] (*). En 1796, el primer presidente de los Estados Unidos anuncia su negativa a presentarse a la re-re-elección, que hubiera ganado cómodamente (aunque tal vez no con el voto unánime del Colegio Electoral como en 1789 y 1792).

La genialidad de Washington, claramente percibida por sus seguidores porteños Mariano Moreno y Manuel Belgrano, es haber creado el poder ejecutivo moderno: poderoso, uni-personal y con derecho de veto sobre la legislación — pero sujeto a control parlamentario y limitado en el tiempo. La construcción del poder ejecutivo es la tarea más difícil de la arquitectura republicana. En 1811, a pocos días de morir Moreno en alta mar, Thomas Jefferson le escribe a Alexander von Humboldt sobre las Revoluciones en América Meridional: "Their greatest difficulty will be in the construction of their executive".

¡Exactamente!

La entrevista al Sr. Laclau muestra que la Argentina, contrariamente a Brasil, Costa Rica, Chile y Uruguay, no logra resolver esta espinosa cuestión. Nos falta el espíritu republicano necesario para lograr un ejecutivo fuerte y uni-personal, pero controlado y limitado en el tiempo. Por otra parte, el Sr. Laclau afirma que "las instituciones no son neutrales". ¡Muy interesante! Pero entonces no vengan a pedir bajas tasas de interés — el tamaño del mercado de crédito depende justamente de la existencia de un neutral third-party enforcer de contratos. Y no digamos nada del completo silencio del Sr. Laclau sobre la independencia judicial y la corrupción, bien captado por el periodista.

(*) Traducida con una introducción en el año 1813 por el GRAL. MANUEL BELGRANO. Prólogo en fac-simile autógrafo del General Mitre. Buenos Aires: Dalmazia, 1902.
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