Monday, September 13, 2010

CHÁVEZ-JUSTINIANO: INSEGURIDAD
"Les ministres ne doivent pas juger" — Montesquieu

Por AM

Hemos escrito en este blog sobre el vínculo entre inseguridad y ausencia de independencia judicial. Los datos están. (Si no lo cree, vaya a caminar una par de horas por las calles de Wellington y por las de Caracas, y verá rápidamente la diferencia). También hemos propuesto un 'modelo' de la inseguridad: alto costo del capital, bajos salarios, sub-desarrollo industrial, crisis fiscal crónica, etc. Me pregunto si este 'economicismo' alcanza. Cuando Chávez copa la Corte Suprema con seguidores incondicionales, cuando Kirchner ve su patrimonio justificado por jueces 'amigos' (tanto en Santa Cruz como en Buenos Aires), estamos frente a un claro breakdown de la legalidad.

El gobernante de turno piensa seguramente que los efectos de esta acción se limitan al estrecho círculo de su influencia directa: patrimonio personal, amigos, etc. No es así. En el instante en el que el titular del ejecutivo ataca la legalidad, los delicuentes o would-be delincuentes toman nota. Vea esta impresionante nota de Clarín: "Los ladrones apuestan más a la información que a los tiros". ¡Las bandas están muy bien informadas! Es decir: no necesitamos esperar que la ausencia de legalidad afecte las tasas de interés y los salarios — todo es más inmediato de lo que imaginamos. Una justicia politizada es por definición una justicia débil: en la Riqueza de las Naciones, Adam Smith identifica la ausencia de independencia judicial con la esasez de recursos del sistema judicial. Una justicia débil disminuye los costos de delinquir (*).
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El emperador de Bizancio Justiniano (482-565) es una de las bêtes noires de Montesquieu. Justiniano opta explícitamente por un partido y "le quita la justicia" a los demás; vacía el sistema legal para acaparar los juicios en su propio palacio. Si la ley no defiende, deja de ser ley: el camino queda abierto para la delincuencia. Montesquieu nota: "Todos los lazos de amistad, de parentesco, de deber, de gratitud, desaparecieron; las familias se destruyeron entre sí"; siguieron "crímenes" y "robos". El imperio no tardó en debilitarse. Damas y caballeros: la inseguridad y la violencia reflejan instantáneamente la ausencia de independencia judicial y el colapso del orden legal. Si logramos comprenderlo, entonces estaremos en condiciones de ofrecer un elemento importante a las oposiciones en Venezuela y Argentina. Más sobre esto pronto. La seguridad, amigos, la seguridad.
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(*) La terminología es de Enrique Szewach: "La 'economía' de las salideras bancarias", Perfil. com. [Ilustración de Memo.fr]

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