NUEVOS IMPUESTOS A LA PETROLERAS

Por FRM

El Reino Unido aumentó los impuestos a la producción de gas y petróleo del Mar del Norte. Los pozos con autorización para desarrollo anterior a 1992 pagaban 50% de impuesto a las ganancias. Estos pozos pagarán en el futuro 81%! Los pozos con autorización posterior a 1992 pagaban 30% de impuesto a las ganancias corporativas más una sobretasa de 20%. A partir de ahora, la sobretasa aumenta a 32%. Esto significa que los nuevos proyectos pagarán impuesto a las ganancias de 62%.

La respuesta de las compañías petroleras que operan en la región fue inmediata: anunciaron que revisarán sus planes de inversión. Uno de los primeros anuncios fue de la petrolera noruega Statoil que paga en su país 78% de impuestos a las ganancias. Estas altas tasas de impuestos son posibles porque se tasa la renta económica que proviene de la escasez del recurso natural.

Los gobiernos —sedientos de nuevas fuentes de financiamiento— encuentran que aumentar los impuestos sobre la industria petrolera no genera resistencias en la población. Muy por el contrario, con el Brent cerca de USD 120 por barril, la medida es aplaudida por el electorado.

En los últimos meses, las acciones de Petrobras no han tenido un recorrido similar al del resto de las grandes petroleras integradas porque se percibía el riesgo de una mayor ingerencia del Estado en la gestión de la empresa. La noticia del aumento de impuestos a las petroleras del Mar del Norte demuestra que las operaciones en países emergentes no son las únicas expuestas a la intervención estatal y al cambio de reglas.