Wednesday, March 16, 2011

PINGÜINOS vs. CISNES NEGROS
"Le meilleur soutien du crédit est un gouvernment sagement organisé" — Necker

Por AM

La idea del "cisne negro" (black swan) fue popularizada por el profesor de finanzas y operador de Wall Street Nassim Nicholas Taleb en referencia a eventos de muy escasa probabilidad de ocurrencia — pero letales una vez que se producen. Las últimas semanas nos han dejado al menos dos cisnes negros: la crisis libia y el terremoto-tsunami-crisis nuclear de Japón. Mientras tanto, la actitud de los pingüinos ha sido de benign neglect: ¡no pasa nada! Puede ser. De hecho, ayer vi en CNBC estimaciones de grandes necesidades de soja en Japón debido al creciente desabastecimiento.

Eufóricos, los pingüinos seguramente pensarán: "Tenemos la suerte del ganador; los cisnes negros no nos afectan". Con estas observaciones del mundo avícola constatamos que el gobierno de la Argentina seguirá apostando a la felicidad del mundo que conoció entre 2003-2007 y 2009-2011: el de la hiper-liquidez global y la super-soja. Es el mundo que soluciona la mayoría de sus problemas económicos. ¡Que los cisnes negros golpeen a otros! ¡Jamás a nosotros! En otras palabras: no habrá cambios institucionales en la Argentina.

Mill & Keynes
Frente al pánico financiero causado por eventos de tipo cisne negro, los gobiernos aprietan los botones keynesianos: masivos aumentos del gasto público e igualmente masivas inyecciones de liquidez [ver]. Van 'toreando' la crisis a la espera de tiempos mejores y/o soluciones de fondo. Pero esto supone un marco de relativa estabilidad de la propiedad, incluyendo —de manera crucial— un banco central independiente. Así, la demanda extra de liquidez es satisfecha sin mayores problemas desde el punto de vista de las expectativas inflacionarias.

En el fondo, John Maynard Keynes sigue siendo un hijo —rebelde y brillante, pero hijo al fin— de John Stuart Mill. Ambos dan por sentado el marco institucional de propiedad estable y bancos centrales creíbles. No es el caso de la Argentina, donde carecemos de una moneda capaz de actuar como reserva de valor. Los cisnes negros en nuestro país tienden a producir estanflación. Desde el punto de vista institucional, la Argentina es más territorio de Montesquieu-Necker [ver] que de Mill-Keynes (*). Hacer keynesianismo en tierra de pingüinos es mucho más difícil. ¡Que los cisnes negros sigan volando en otras direcciones!
* * *
(*) Ver la lamentable pelea de Guillermo Moreno contra las consultoras que opinan distinto. En 1802, Jacques Necker advertía que la disponibilidad de estadísticas CRITICABLES por el público era una condición necesaria de la expansión del crédito. En Dinamarca o en Holanda, el Sr. Moreno sería considerado como lo que es realmente: un político de extrema derecha.
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