LA NADA OPRIME
"The virtuous Brutus lent money in Cyprus at eight-and-forty per cent" — Adam Smith
Por AM
"La nada oprime", leí el otro día en la traducción castellana de Wilhelm van Humboldt [ver]. Qué frase. Humboldt se refiere a la necesidad del Estado como proveedor de la SEGURIDAD que necesitan los ciudadanos para poder desplegar su talento creativo. (No logré ubicar la frase en el texto original, lo que ilustra bien la decadencia de mi alemán). En un pasaje de The Origins of Political Order, Vol.1 [ver], Francis Fukuyama nos recuerda que no hace falta imaginar como sería la vida en un país sin gobierno. La realidad de la vida en partes del África sub-sahariana —donde los "gobiernos" recaudan menos del 10% de PBI en impuestos— lo demuestra todos los días.
En ausencia de gobierno, no hay una explosión de entrepreneurship, sino de ... violencia. En las regiones del África sin Estado, no se ve una infraestructura "privada" de caminos, canales y agua potable; lo que se ve son jóvenes armados hasta los dientes. La vida cotidiana gira en torno a la guerra y la guerra civil. En otras palabras: la nada oprime. En un genial pasaje de la Riqueza de las Naciones, Adam Smith provee otro ejemplo. Comentando la relación entre la tasa de interés en el mercado de crédito y la calidad del sistema judicial, Smith escribe:
Among the barbarous nations who overran the western provinces of the Roman empire, the performance of contracts was left for many ages to the faith of the contracting parties. The courts of justice of their kings seldom intermeddled in it. The high rate of interest which took place in those ancient times may perhaps be partly accounted for from this cause.
Tuve el agrado de encontrar una perfecta ilustración de este pasaje, en una entrada de agosto de 2010. El incidente está tomado de la violenta historia política de los francos; lo relata Gregorio de Tours (539-594) [ver]. En 579, el rey de los francos Childeric decreta un impuestazo sin precedentes: poll-tax más impuesto a la tierra. Gregorio de Tours enfatiza lo de 'decreto': no hay representación, ni consulta, ni legislación. Uno se imagina lo que sigue: revueltas, saqueos, linchamientos de recaudadores de impuestos, colapso económico y ... epidemias.
Pero aquí viene lo interesante. Armentarius, un banquero judío que había adelantado fondos al recaudador de impuestos Eunonius, es asesinado brutalmente. La familia de la víctima encuentra las pruebas (el cadáver en un pozo de propiedad de Eunonius). Pero los "tribunales" del rey se niegan a intervenir. No hay que ser mago para adivinar que sucedió con la oferta de recursos prestables en el mercado de crédito. Adam Smith concluye: en ausencia de un sistema judicial estatal —pero independiente del poder político— la tasa de interés será usuraria.
La nada oprime.
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